¡¡QUE RICAS LAS OLIVAS Y EL ACEITE!!

Con este taller pretendíamos cumplir varios objetivos, en primer lugar seguir con la dinámica de hacer pequeñas investigaciones sobre temas por los cuales los niños tienen interés, plantando de esta forma la semilla para su futuro aprendizaje autónomo y significativo, también conocer los procesos de recolección y después de transformación de la aceituna y por supuesto haceros partícipes a las familias del proceso educativo de vuestros hijos con todas las ventajas que ello conlleva. Todo ello con la guinda del pastel que es aprender disfrutando y disfrutar aprendiendo.


Tras hacer algunas investigaciones previas a través de vídeos en la pizarra digital y algunos libros y revistas que llevamos a clase pasamos a la primera toma de contacto de manera real con los olivos que tenemos en el patio del cole y con las aceitunas.  La primera actividad consiste en hacer una primera recogida de las aceitunas que se han caído al suelo y de plantas aromáticas que hay en el lugar.

Tras la recolección, ya en clase observamos detenidamente nuestra cosecha, olemos las plantas, decimos algunas propiedades de ellas e incluso algún niño que cree imposible que esas aceitunas estén malas, dado su buen aspecto, se atreve a probar una, espero que después de ello no le haya tomado manía a las aceitunas.





y por fin llega el momento más esperado por los niños, los talleres donde participan las mamás y los abuelos. Hemos tenido cuentos relacionados con la temática, recogida y explicación de las distintas formas de recogida de la aceituna (Técnicas modernas y tradicionales)y tras el duro trabajo un buen desayuno saludable a base de zumo de naranja y tostadas con aceite y entre tanto una cata de aceitunas (no curadas por nosotros, afortunadamente) y unas riquísimas magdalenas de aceite.




 
















 Después de disfrutar con los cuentos, salimos a los olivos donde el abuelito de Daniel nos explica como se cogen las aceitunas del árbol con técnicas modernas y otras no tanto.




 

 y ahora ¡¡a desayunar!! para terminar el día con el estómago lleno y la mente también.


 

 Una abuelita nos explica lo que necesitamos para curar las aceitunas y como hacerlo y nosotros tomamos buena nota de ello para hacerlo luego en clase.


 

y como hemos visto que las aceitunas están muy ricas, seleccionamos las más maduritas y nos decidimos ha hacer las nuestras.


 

Después de un mes de curación y cambios de agua, las aceitunas han dejado de estar amargas, pero aun así todos coincidimos en que preferimos las compradas en la tienda.